Danny Boyle, director de Trainspotting entre otras, nos presenta su primera dirección de una película de ciencia-ficción. Nuestro Sol está en horas bajas y la Tierra vive sumida en un invierno nuclear el cual puede llevar a la raza humana a la extinción total, para evitar esta catástrofe planetaria se envía una nave con un cargamento nuclear al mismo Sol, estrellando la carga nuclear se podrían reiniciar los procesos nucleares y así regenerar la esperanza de vida en la Tierra.
En la nave, Icarus II ya que hubo una anterior que no acabó su misión, se encuentra una tripulación formada por científicos y astronautas donde se suceden una serie de percances que pondrá sus vidas y su misión en peligro.
Me gusta mucho como está llevada ya que te tiene en un suspense sostenido que va creciendo hacia el final frenético y descabellado. Me gustó mucho la ambientación ya que siempre tuve presente la soledad de la nave frente al aislamiento del espacio vacío. Las secuencias cinemáticas en las que se representa el Sol son muy acertadas, lo dice alguien que ha sido muy aficionado a la astronomía y conozco los métodos de observación del Sol y como se muestran, realmente impresionante y preciso.
Al final salí con la adrenalina a tope y con una sensación de haber visto una buena película de ciencia-ficción, de mis preferidas.
* N.Rating-O-Matic: 7,5 *